Si algo recordamos, aunque sea vagamente, de nuestras clases de historia de la primaria, secundaria y preparatoria, es la existencia de momentos específicos que, de alguna u otra manera, transformaron e influyeron fuertemente en el desarrollo de los acontecimientos políticos, económicos y sociales de nuestro país. Se nos habló en infinidad de ocasiones en estas clases acerca de la conquista, la independencia y, de la que me interesa hablar en esta ocasión, la revolución. Para tratar de entender este último proceso, en estas limitadas y acríticas lecciones que recibimos durante nuestros años de infancia y adolescencia, se nos describió en pocas plabras cómo, gracias a la conciencia social (véase Villa) y al conocimiento real de las carencias del pueblo (véase Madero) que tenían un grupo de valerosos hombres, pudimos acabar con la infinita maldad de Porfirio Díaz y, gracias a esto, construir el plural, democrático y hermoso país que tenemos ahora… un país que, a diferencia del México porfiriano, no cuenta con élites groseramente ricas, ni tiene inconformidades campesinas, ni pobreza, ni represión a los medios de comunicación independientes… Bueno de esto mejor ni hablar porque nos ponemos todos a llorar y me desvía del punto medular que quiero tocar en esta ocasión. Cuando nos narraron la historia de la revolución en alguna ocasión (si es que tuvimos suerte) nos llegaron a mencionar sus antecedentes por lo que, aunque no sepamos bien en qué consistió, tenemos el vago recuerdo de la huelga en Cananea de 1906.
La huelga de Cananea fue un movimiento de"inconscientes" trabajadores mineros que -al igual que todos los movimientos obreros, estudiantiles o gremiales en nuestro país- hacían una serie de peticiones exorbitantes a los pobres-multimillonarios gringos dueños de la mina de cobre ubicada casi en la frontera con los Estados Unidos. Entre las peticiones de estos "abusivos" trabajadores estaba la de un ¡¡salario mínimo!! y el derecho de ascender (una barbaridad en verdad... que falta de cordura)… pero como el general Díaz se llevaba bastante bien con los dueños, permitió que un grupo de rangers estadounidenses ingresaran al territorio y mantuviera a raya a estos enloquecidos hombrecillos… Finalmente, como los rangers no pudieron contener el movimiento, se inició un agresivo enfrentamiento que, afortunadamente para la gente bien norteña de ese tiempo, pudo ser finalmente sofocada por el gobernador de Sonora… a pesar de que la huelga fue reprimida, la chispa que encendió Cananea, rápidamente se extendió por todo el país y fue –entre otros- uno de los factores que influyó de manera decisiva en el inicio del movimiento armado…
Hoy, 100 años después de los eventos mencionados, Cananea sigue siendo un foco de tensión social y de posibles enfrentamientos violentos. Desde hace tres años el sindicato minero tiene parada esta mina (una de las más lucrativas del país, propiedad del Grupo México) en protesta por las órdenes de aprehensión que el gobierno federal ha girado en contra de su líder Napoleón Gómez Urrutia, el cual se encuentra en la actualidad auto-exhiliado en Canadá (apoyado por las grandes centrales sindicales y las mineras canadienses, quienes tienen cuantiosas inversiones en México). Las consecuencias de este paro han sido fatales para el pueblo de Cananea y las posibilidades de que solucione el problema sin derramamiento de sangre parece ser cada día más remotas (ya que no hay ningún tipo de incentivo para hacerlos… ambas posturas -la del sindicato y la del gobierno- se encuentran totalmente radicalizadas). Para echar aún más leña al fuego hace aproximadamente dos semanas una Corte declaró improcedente la huelga y terminó el contrato colectivo de los trabajadores con el Grupo México por lo que, legalmente, los huelguistas podrán ser expulsados en cualquier momento de la mina.
Otro elemento que debe tomarse en cuenta es la movilización que las centrales sindicales estadounidense y canadienses han hecho para que la atención internacional se vuelque sobre Cananea. Evidentemente toda esta situación no ha hecho más que incrementar las tensiones en la localidad, por lo que un sangriento enfrentamiento podría traer importantes repercusiones políticas ya no sólo a nivel interno, sino incluso en la arena internacional… o podría servir, como en 1906, de mechita para algo más grande… buenas noches y buena suerte…
No hay comentarios:
Publicar un comentario