domingo, 23 de mayo de 2010

De todo


Y no ganó Biutiful… bueno era de esperarse… a pesar de los nueve minutos de aplausos, la realidad es que las críticas habían sido mixtas… el único consenso era sobre la actuación de Bardem… todo el mundo dice que está espléndido y se vio reflejado a la hora de repartir los premios… ni modo Iñarritu, ya será para otra ocasión… la cual de seguro habrá, aunque haya algunos escépticos que dicen que tras su separación de Guillermo Arriaga, el guionista que lo acompañó en sus tres películas previas –Amores perros, 21 gramos y Babel- , las cosas nunca serán las mismas… hablando de Arriaga, se acaba de anunciar que colaborará en una nueva cinta que dirigirá Darren Aronofsky (el director de Pi y Requiem por un sueño) y protagonizará Brad Pitt… Pitt y Arriaga ya trabajaron juntos en Babel y creo que hicieron un trabajo bastante decoroso… a ver qué sale de todo esto…

El Jefe Diego sigue perdido… la familia solicitó que no se diera a conocer nada de la investigación… hoy salió un reportaje en el país de los misterios del Jefe Diego… de su desaparición tras el debate presidencial del 1994… del poder que ha adquirido en los últimos años… de su seguridad y arrogancia… de que no trajera ningún tipo de guardaespaldas en una época de tanta inseguridad en México… todo suena y se ve sospechoso… es una figura de gran envergadura y las notas en el exterior han sido magras… al interior también… Televisa se calló la boca… Una muestra más del dominio y la manipulación que existe de la información en este país…

Todo está casi listo para iniciar el Mundial de Sudáfrica… los niños ya tienen su álbum de estampitas… los negocios ya tienen sus “promociones” para el mundial… los restaurantes están duplicando sus precios… la prensa internacional, tal y como pasó en China hace dos años, no deja de señalar los graves problemas políticos, económicos y sociales que existen en Sudáfrica… abundan las historias acerca de nuevos ghettos de ciudadanos pobres y negros que viven hacinados porque no pueden acceder a mejores condiciones de vida… las tensiones raciales siguen… hace aproximadamente un mes el líder ultraderechista, Eugene Terreblanche, murió asesinado a manos de dos de sus empleados negros… cientos de sudafricanos salieron a despedir a su líder y a demostrar que, tras más de 15 de haberse abolido el apartheid, el racismo y la intolerancia siguen imperando en buena parte de la sociedad blanca sudafricana…

Más información… Cerati sigue en terapia intensiva… Federer está siendo rebasado por un imparable Nadal… La Unión Europea sigue en una crisis estructural que amenaza con desestabilizar a toda la economía internacional… Tailandia está a dos de iniciar una guerra civil… Sigue en huelga el sindicato de British Airways… Existe la firma creencia de que México va a pasar a octavos de final… Orozco sí va como candidato del PAN en Aguascalientes… Los precios siguen subiendo ridículamente… El calor está insoportable… Se acaba Lost… Sigue la incertidumbre, caos, violencia, miedo… Un futuro oscuro para las nuevas generaciones… Cansancio, hartazgo, hastío… bulimia de información… Buenas noches y buena suerte…

sábado, 22 de mayo de 2010

Festival de Cannes


Para mí, sin lugar a dudas, Cannes es la meca del cine. Aunque muchos redactores y críticos (incluidos los del diario español El País) consideren al Óscar como el máximo reconocimiento cinematográfico que puede alcanzar un actor, un director o una cinta en el escenario internacional, la realidad es que este “codiciado” monigote dorado se otorga generalmente a personalidades locales (es decir, estadounidenses o británicas), con muy esporádicas participaciones de representantes de otras nacionalidades (o si lo hacen, es en cintas de producción anglosajona… algunas excepciones a esta regla: Sofía Loren por Dos Mujeres). Esto coloca al Óscar más en la categoría de premios como el Goya, los BAFTA o nuestros gloriosos Arieles, que en el nivel de Cannes. Cannes pertenece a otra categoría… a una mucho más internacional. A diferencia de en las premiaciones les mencioné anteriormente, en Cannes no existe una categoría de “Mejor Película Extranjera”. Todas compiten por igual. A su selección llegan cintas de todos los confines del planeta. En los últimos veinte años películas belgas, iraníes, japonesas, chinas e italianas han tenido el privilegio de llevarse el máximo galardón de la contienda, es decir, la famosa Palma de Oro…



A pesar de ello, la realidad es que Cannes tampoco es el “paradigma” de la internacionalidad. El peso que tiene el cine europeo y estadounidense en la contienda es innegable y prueba de ello es el “internacional” Jurado de este año. Nuestro querido y venerado Tim Burton es el presidente (estadounidense, obivamente) y los miembros son: Alberto Barrera (italiano, Director del Museo Nacional del Cine), Kate Beckinsale (estadounidense, actriz de churros como Pearl Harbor e Inframundo), Emmanuel Carrere, (francés, escritor), Benicio del Toro (estadounidense, actor bastante cumplidor), Alexandre Desplat (francés, compositor), Víctor Erice (español, director), Shekahr Kapur (hindú, aunque buena parte de su reconocimiento es por el trabajo que ha realizado en Occidente, incluyendo la saga de Elizabeth) y Giovanna Mezzogiorno (italiana, actriz). Como vemos un Jurado así lo que se dice internacional, no lo es. En las cintas que participan en la Selección Oficial ocurre un fenómeno similar. La mayoría son occidentales o de los países desarrollados del este de Asia (Corea del Sur, Japón, China) y regiones enteras como África, el sudeste asiático, América Latina y Medio Oriente quedan excluidas de la selección oficial de donde se saca a la película ganadora (este año únicamente hay tres coproducciones de europeos con países de estas regiones: con Tailandia, México y Chad).



Si vemos las estadísticas de las cintas que han ganado la Palma de Oro vemos que esta tendencia prevalece. De las tres Palmas que ha obtenido América Latina una se le otorgó en un año en que hubo ¡¡11 galardonadas!! (María Candelaria de Emilio Fernández, orgullosa representante de nuestro país), la otra fue un coproducción mexico-española (Viridiana en 1961 dirigida por Buñuel que lo único que tenía de mexicana era que la había producido Gustavo Alatriste y protagonizado Silvia Pinal… la realidad es que a lo sensores de la época de Franco les había parecido muy subversiva y no habían permitido que representase a España por lo que, en aras de que se mantuviera en la contienda, se decidió colocar en los créditos que la coproducción era mexicana… la realidad es que la cinta es más española que García Lorca) y la tercera fue una brasileña en 1962. Únicamente una cinta africana (de Argelia), una iraní, una turca, una china y una hindú (el año de los 11 premios) han sido premiadas con el “máximo” galardón que otorga el Jurado “internacional” del Festival de Cannes (si se han entregado más ochenta Palmas de Oro juzguen ustedes mismos que tan “internacional” es el evento). Las otras cintas que han obtenido este reconocimiento evidentemente son europeas y estadounidenses y, en mucho menor grado, japonesas.



A pesar de esto, debo reconocer que disfruto mucho la contienda en Cannes. Sé que no es lo equitativa que debería ser y que finalmente siempre hay intereses políticos detrás que muchas veces merman el desarrollo de la competencia (el triunfo de Michael Moore por Farenheit 9/11 en el 2004 me pareció un verdadero chiste y más una crítica hacia la política de Bush que un reconocimiento a la calidad de la cinta), sin embargo, me encanta ver a hindús, chinos, iraníes, coreanos, mexicanos e italianos disfrutando de películas diferentes, muchos menos convencionales de lo que generalmente las conservadoras contiendas estadounidenses tienden a premiar (que Julia Roberts haya ganado el Óscar en 2001 en una terna donde ni siquiera estuvo la gloriosa actuación de Björk en Bailando en la Oscuridad demuestra la rigidez de la Academia estadounidense y la poca fiabilidad que existe para considerar a una cinta ganadora del Óscar como la “Mejor del Año”). Además, la realidad es que Cannes está repleto de glamour y, honestamente, eso a todos los simples mortales nos encanta… Mantenemos los dedos cruzados por Iñarritu y Biutiful (por lo pronto, ya se anunció que Bardem recibió el premio al Mejor actor en la contienda)…. Buenas noches y buena suerte.

sábado, 15 de mayo de 2010

Día del maestro


Como muchos saben durante unos añitos (casi cuatro) me dediqué a dar clases de natación a niñitos y a bebés. En esta honorable profesión, si algo esperábamos con ansia además del día de pago, era la llegada del día del maestro. El día del maestro representaba la posibilidad de que las acaudaladas madres de nuestros alumnitos se pusieran guapas y nos dieran uno que otro regalillo para reconocer el trabajo que realizábamos. Debo reconocer que a mí siempre me iba muy bien. La verdad es que le echaba bastantes ganas a mis clases, faltaba muy poco y a pesar de que era bastante estricto con los pequeñuelos, era muy cariñoso y respetuoso con ellos. Me llegaron a regalar chamarras, lociones, sudaderas, playera, relojes, libros (una me dio la biografía de Plutarco Elías Calles ¿¿¿??? Sí, sí, muy raro, de plano me vio muy inculto), interminables cantidades de chocolates, etc.. En realidad, cualquier detalle, yo lo agradecía profundamente.

Cuando yo era pequeño, mi mamá también era muy detallista con todos mis profesores y profesoras. El día del maestro siempre les llevaba algo y, aunque francamente había algunos que eran fatales, la realidad es que la mayoría se merecía aunque fuese un mínimo reconocimiento. Yo muchas clases diferentes (karate, natación, inglés, pintura…) así que cuando venía el día del maestro, en mi casa se repartían, literalmente, un arsenal de regalos. Hoy en día, al mirar hacia atrás, me da gusto que mis padres tuvieran la calidad humana para reconocer el arduo esfuerzo que implica el trabajo en la docencia.

Debido a mis múltiples actividades pasé por una inmensa cantidad de profesores y, aunque de seguro tuve unos muy buenos en kínder y en mis primeros años de vida, desafortunadamente no me acuerdo de ellos. Por eso les hablaré únicamente de algunos de los profesores que recuerdo con particular cariño y admiración. En quinto y sexto de primaria tuve una profesora que se llamaba Martha. Miss Martha (porque éramos Colegio fresita y todas eran Miss jajaja) fue una gran influencia mi vida. Pasé largas horas de mi último año de primaria en su casa estudiando debido a que me estaba preparando para un concurso de conocimientos nacionales. Gracias a su arduo trabajo, me fui muy bien en el concurso y me pude dedicarme a flojear durante los siguientes tres años de secundaria (no sé qué tan bueno sea jajaja pero en verdad sí fue una preparación muy completa). Miss Martha es una gran maestra y un maravilloso ser humano. La último vez que supe de ella fue antes de entrar a la universidad. Espero volver a verla pronto.

En la secundaria todos mis maestros eran unos verdaderos personajes (para bien o para mal). Había algunos particularmente buenos (Marisela Barajas de Español o el profesor Armando que nos daba historia), sin embargo, creo que los siguientes grandes profesores que tuve fueron hasta la Preparatoria. Una de ellas se llama Coco y, hasta hace unos años, impartía la materia Literatura. Su presencia en mi vida fue trascendental ya que gracias a su clase retomé una de las grandes pasiones de mi vida: la lectura. Particularmente también destacables fueron el profesor David y el superestricto Hermano Osiel (que nos ponía a leer a Marcuse, a Scheler y a Zubiri en tercero de Prepa ¡¡imagínense!!) quienes, según tengo entendido, ya no dan clases en mi ex Prepa.

Tampoco puedo olvidar a mis profesores de otras ramas. De mis entrenadores de natación recuerdo con particular cariño a Pepe (con el que regresé en mi última etapa de master y es toda una institución en la Nelson Vargas de Aguascalientes), a César y al polémico Rafa (jajaja que todavía cada vez que nos reunimos los antiguos miembros del equipo siempre sale en las pláticas). Entre quienes desarrollaron mi "dotes artísticos" destacan Paty Glinz, Adriana -que me dio un taller de “Letras en Movimiento” en la prepa- y Mauricio mi último profesor de teatro (ya en la universidad, a él le debo el hecho de que me atreva a hablar en público jajaja). De inglés recuerdo mucho a Miss Yola en primaria, a Miss Laurita en la secundaria y a Maripaz en la prepa.

En la Universidad he tenido grandes profesores que admiro y respeto muchísimo. Entre ellos destacan Víctor Godínez, Jacobo Casillas, César Villalba, Jesús Gallegos, María Cristina Rosas, Fabien Adonon, Carlos Ballesteros, Natalia Rivera, David Herrera, Ana Cristina Castillo, Evelyn Téllez, Samuel Sosa… quienes, irremediablemente, han influido en mi forma de ver al mundo y, sobre todo, en mi vida académica y profesional… Feliz día del maestro a ellos y a todos los grandes seres humanos que se dedican a la profesión más noble y hermosa del mundo: la docencia… Buenas noches y buena suerte…

lunes, 10 de mayo de 2010

Día de las madres


Para los mexicanos no hay nada más sagrado que la madre. Honestamente desconozco si en otras culturas se dé un fervor similar al que hay en México con respecto a la figura materna, pero aquí este fenómeno es algo espectacular. Los centros religiosos más importante del país están dedicados a deidades femeninas. La Virgen de Guadalupe es, sin lugar a dudas, el gran símbolo de identidad que nos une como mexicanos. Evidentemente, como mexicano y como ser humano, yo no soy la excepción…

Me pesa enormemente no poder estar con mi mamá en este día. Estoy consciente de que el día de las madres es algo meramente simbólico y que en una relación madre-hijo importan mucho más otros elementos que el pasar juntos un día específico del año. Hay hijos que sólo en este día recuerdan a su madrecita y para tratar de compensar esto, les compran espectaculares regalos a infladísimos precios. En lo personal, prefiero trabajar y hacerme digno de ella todos y cada uno de los días de mi vida y disfrutar al máximo cada momento que compartimos cuando voy a Aguascalientes. Aún así, no puedo negar que me gustaría estar con ella y poderla consentir en este día. Se merece esto y mucho, mucho más.

Mi relación con mi mamá es compleja. Somos muy parecidos y muy distintos. Físicamente no nos parecemos mucho, aunque últimamente me ha dicho que le recuerdo a su papá y a uno de sus hermanos. Nuestra sensibilidad y nuestro interés por los demás nos unen. Ambos tenemos múltiples grupos de amigos y disfrutamos de la compañía de todo tipo de personas. Mi mamá tiene amigas que son sólo unos años mayores que yo y yo tengo amigos y amigas que son sólo unos años menores que ella. Hace poco me sorprendió cuando me dijo que la fue a invitar a su baby shower una compañera mía de la secundaria de la que yo ni siquiera me acordaba… mi madre es única, es especial y el mundo se da cuenta de ello. Somos distintos en nuestras maneras de ver el mundo. Mi madre es una mujer conservadora y religiosa. Yo no soy así. Muchas veces nuestras posturas políticas e ideológicas se encuentran completamente encontradas, sin embargo, las entiendo y las respeto profundamente.

Mi madre y yo hemos vivido muchas cosas juntos. Hubo episodios en que parecía que sólo nos teníamos el uno al otro. En los momentos más duros traté de que mi madre se apoyara en mí para que tuviera fuerzas para salir adelante. Nunca me lo permitió… en su afán de protegerme, prefería cargar ella con todo. A pesar de eso, intentaba ayudarla en todo lo que estuviera a mi alcance. Nunca fui un hijo rebelde y me esforzaba verdaderamente porque, aunado a todas sus preocupaciones, no tuvieran que angustiarse por mí. Su lucha fue impresionante y tuve la oportunidad de acompañarla durante un largo y difícil proceso. Ella sola logró sacar todo adelante. Estudió una maestría, sacó su casa a flote, su trabajo, su relación de pareja, a sus hijos… Sigo sin entender de donde salió tanta fuerza. No hay nadie, absolutamente nadie, en el mundo a quien admire y respete tan profundamente como a ella.

En el 2006 decidí venirme a estudiar a México. Sabía que mi decisión le iba a causar un enorme dolor. No había recursos para apoyarme. Mi madre no sólo estaba profundamente triste por mi decisión, sino sumamente preocupada. Se le iba su hijo mayor. Nunca lloró enfrente de mí. El día que me fui, unos amigos que me fueron a despedir me dijeron que se derrumbó momentos después de que el camión arrancase. Hasta esos niveles llegó su sacrificio. Se tragó todo su sentimiento con tal de que a mí me doliese menos despedirme de ella. Ese mismo año, tuvo que enfrentarse a un nuevo reto. Mi madre se había sacrificado por todos y había dejado su salud de lado. Afortunadamente, también de esto pudo salir adelante. En la actualidad, esa incansable señora sigue luchando. Trabaja como hormiga para poderme apoyar en mis estudios y para que mi hermano pueda acceder a una buena educación. Dice que la educación es su “herencia”. Para mí a eso no se limita su herencia, ya que su gran legado es su ejemplo de amor, de sacrificio, de lucha y de fortaleza. Por eso, y por todo lo que ha hecho por nosotros, tengo que agradecerle todos los días. Te amo con todo mi ser mamá… Buenas noches y buena suerte…
PD: Yo de pequeñin y mi mami.

domingo, 9 de mayo de 2010

Fútbol y yo


No puedo negar que nunca me ha gustado el fútbol. En mi primaria, mi secundaria y mi prepa los miembros del equipo de fútbol eran pseudo-dioses que recibían todo tipo de privilegios (no sólo estaban un estrato social arriba del resto de todos los mortales, sino que incluso se les otorgaban concesiones en otros aspectos) tan sólo por ser los representantes de la escuela en este popular deporte. Dentro del microcosmos marista, jugar fútbol era cuestión de status. Mi primaria estaba todo el tiempo rodeada de balones y el gran evento de cada día era cuando el director salía y pateaba uno de ellos hacia el cielo. Los niños, las maestras, los intendentes, todos salían para ver como el balón caía en algún lugar del enorme patio de recreo. No tiene nada de sentido, pero era una extraña costumbre que nos unía a todos como comunidad escolar. Como en mi infancia era un niño lento y regordete que le tenía miedo a los balones, evidentemente esta “tradición” no sólo me parecía anormal, sino que incluso me daba un poco de miedo. En ese mundo no compartir una exacerbada pasión hacia el fútbol te hacía sentirte excluido. Yo me sentía excluido.

En mi casa las cosas no eran diferentes. Los primos con los que convivía regularmente amaban jugar al fútbol (Pipis y Towi jajaja gracias a Dios creo que también a ellos se les redujo bastante su amor hacia este deporte) y en mi familia nuclear era de ley que cada domingo nos sentáramos a ver la lenta y monótona evolución de la “liguilla” mexicana. Siempre eran los mismos equipos y el 90% de los partidos eran estúpidamente aburridos. Aún así mi mamá gritaba eufóricamente y mi papá se sentaba religiosamente a verlos. Para mí era una brutal pérdida de tiempo. A mi hermano le gustaba un poco más el fútbol, pero creo que ninguno de los dos heredamos ni remotamente los “genes” de amor hacia este popular deporte. Hoy en día, sólo mi padre lo ve. Mi mamá está o muy ocupada o muy cansada para perder su tiempo viendo como todos empatan o ganan por un triste gol que no sirve para justificar las dos horas que se pasó sentada viéndolo y a Alex simplemente no le importa. Me agrada que mi papá lo siga haciendo. Me hace sentir que hay cosas que no cambiarán nunca. Me hace sentir niño otra vez. Ahora que vivo lejos, una de las cosas que más disfruto cuando voy a visitarlo es sentarme y verlo disfrutar de los partidos. Sigo odiando el fútbol, pero debo reconocer que amo profundamente ver como a él lo hace feliz.

Así que, aunque odie el fútbol, la realidad es que en México no sólo mi núcleo familiar, sino la sociedad en general, están inmersos en una dinámica fútbolera que nunca llegaré a comprender del todo. En la UNAM las alusiones a los partidos de los PUMAS son constantes y buena parte de la cultura popular es basa en saber quien fue o no fue seleccionado para representar a México en la Copa Libertadores o en la Copa del Mundo. La querella popular constantemente habla fútbol. Como yo hace siglos no me siento a ver un partido (la verdad ni los del Mundial me llaman mucho la atención y si me llegase a reunir a ver algunos de ellos creo que mi atención estará más centrada en la comida y las cervezas que en la evolución del juego en sí…) me sigo sintiendo excluido de buena parte de las conversaciones que se refieren al tema pero, a estas alturas del “partido”, eso francamente me importa un reverendo cacahuate. Mínimo tengo nociones básicas. Sé que las Chivas no son sólo animalitos y que Cuauhtémoc no fue sólo un tlatoani mexica. Para mí, eso es más que suficiente. Hace unos meses me invitaron a formar parte de un equipo de fútbol. Acepté. Contrario a lo que cualquiera hubiese creído, no me la pasé tan mal. Fue un gran reto personal y descubrí que, con las personas adecuadas, puede ser un deporte incluso divertido. Sigo convencido de que el fútbol nunca será algo que disfrute, sin embargo, fue una experiencia que sí ayudó mucho a disminuir mi animadversión… Supongo que, como esposa resignada, ya acepté que si pienso vivir en México tendré que convivir el resto de mi vida con él… Que más me queda… Buenas noches y buena suerte…

viernes, 7 de mayo de 2010

Aguascalientes y la política


La cosa en Aguascalientes está que arde. Mientras que la mayor parte de los hidrocálidos disfrutan las “delicias” de su gloriosa Feria Nacional de San Marcos, un pequeño porcentaje (porque la realidad es que grandes segmentos de la población –y en especial los jóvenes- están muy poco politizados) está muy preocupado frente a la manera en que se está desenvolviendo la elección gubernamental de este año. Todo es un cochinero. El candidato por el PAN, Martín Orozco, corre el riesgo de perder la posibilidad de competir por la gubernatura debido a que desde noviembre del año pasado existe un proceso penal en su contra (él se defiende diciendo que es una artimaña política para sacarlo de la contienda… lo cual no se me haría nada raro… sin embargo, la realidad es que el PAN sabía que existía esta posibilidad y aún así decidió registrarlo como candidato). Tras la notificación del IFE estatal de que Orozco no podrá participar en la contienda (a pesar de tener un amparo federal), ahora el TRIFE es el que tendrá que determinar si es viable que el candidato continúe su campaña o si Acción Nacional se quedará sin la posibilidad de competir por la gubernatura del estado. Como pueden ver, todo está muy turbio.


La realidad es que la vida política en Aguascalientes enfrenta una de sus más severas crisis, sino es que la más severa, de los últimos años. Conocida por ser un tradicional bastión panista y uno de los primeros estados en vivir la famosa “transición democrática”, Aguascalientes durante años fue ejemplo del progreso y del bienestar que supuestamente iba a traer al país la apertura democrática y la alternancia política. Se le atribuyó directamente a Acción Nacional la bonanza económica que vivió el estado entre finales de la década de los noventa y principios de este nuevo siglo. La realidad es que múltiples factores incidieron en que se consolidara esta pasajera bonanza, sin embargo, no se puede dejar de reconocer que los gobiernos panistas hicieron su trabajo y, aunque me duela en el alma reconocerlo, lo hicieron bien.


Hoy las cosas pintan muy diferentes para el pequeño estado. La gestión de Luis Armando Reynoso Femat (la que concluye este año) ha sido desastrosa y no sólo deja al estado profundamente endeudado y completamente fragmentado políticamente, sino con una opinión pública molesta y desencantada frente al nepotismo, la impunidad y la corrupción que caracterizó a toda la administración de este peculiar personaje. Reynoso Femat dedicó todas las energías de sus seis años de gobierno a realizar obras “majestuosas” (el estadio, la Isla San Marcos, llenar de palmera toda la ciudad, sólo por mencionar algunas) y a darse una vida de señor feudal (los rumores de sus fiestas, sus adquisiciones materiales o sus) con los limitados recursos de un estado que atraviesa por un severo estancamiento de su actividad económica y que, literalmente, vive de la derrama económica de las contadas semanas que dura su famosa Feria (imagínense como está si el año pasado se canceló).


El caso de las elecciones ha sido paradigmático. A finales del año pasado parecía un hecho que el PAN perdería la gubernatura del estado (¿pueden creer que se vislumbrara la posibilidad de que el PAN perdiese al conservador Aguascalientes? Imagínense que tan mala ha sido la gestión del actual gobernador) debido a que el posible candidato del blanquiazul, Raúl Cuadra, era sumamente impopular y muy cercano al controvertido gobernador. El PAN a nivel nacional, viendo la posibilidad real de perder la elección de 2010, prefirió impulsar la candidatura del conocido y popular ex alcalde de la capital Martín Orozco (cabe resaltar que Orozco y Reynoso Femat fueron compañeros de fórmula de 2004). Esto, evidentemente, molestó mucho al cuasi despótico gobernador el cual, en un acto de completa inmadurez política, comenzó a apoyar a su amigo personal, el candidato príista Carlos Lozano de la Torres, en contra de la candidatura de Orozco. Se dice que, detrás del proceso penal en contra de Orozco, se encuentran directamente involucrados Reynoso Femat y Lozano de la Torre. Conociendo a ambos personajes, no dudo que esto sea así.


El caso de Aguascalientes refleja dos tendencias que se han venido consolidando en los últimos años dentro de la política mexicana: la indisciplina partidista y el “resurgimiento” de gobernadores-caciques que son completamente intocables. Al igual que lo que se vivió en San Luis Potosí hace menos de un año, el gobernador, por motivos meramente personales, no ha tenido empacho en apoyar a un candidato de otro partido, aunque esto finalmente le cueste la gubernatura al propio. Esto no es hablar de disciplina partidista. Igualmente Reynoso Femat es un ilustre representantes de la lista de gobernadores –Ulises Ruiz, Fidel Herrera, Mario Marín, Peña Nieto- que son verdaderos caciques y que se encuentran muy por encima de la ley y de las instituciones de sus respectivos estados. Tristemente esta es una tendencia que se ha incrementado en el país. Habrá que ver si esta telenovela, al igual que todo el sexenio de Reynoso Femat, nuevamente acaba en impunidad… Buenas noches y buena suerte…


PD: Imagen del gober Reynoso (derecha) y Martín Orozco.

domingo, 2 de mayo de 2010

X men


La verdad es que chico nunca fui fanático ni de las cintas de acción, ni de las caricaturas, ni de los cómics. La única caricatura de superhéroes que me gustaba era Batman y eso porque en realidad está excelentemente bien realizada (la serie con personas no jajaja esa era pésima, la de caricaturas). De películas de acción sólo me gusta Máxima Velocidad y eso porque considero que su trama está “regularmente” trabajada. Sin embargo, debo reconocer que sí tengo una gran debilidad en el mundo de las cintas de acción, las caricaturas y los cómics: los X men. De los X men me fascina todo. Desde las historias hasta las animaciones, pasando por los personajes y la producción de las cintas. Los X men son relegados sociales, están fuera de lugar… luchan por no ser permanente estigmatizados y por no iniciar una lucha abierta con la sociedad que los rechaza. Hay un mensaje más allá de la simple lucha. Adicionalmente, hay mutantes de todos los géneros y las razas. Hasta la fecha me siguen gustando bastante… afortunada o desafortunadamente, me sigo sintiendo identificado con algunas de las problemáticas que enfrentan estos simpáticos mutantes…


De chiquito quería ser Cíclope. Me fascinaba su trágica historia y su extraño poder. Adicionalmente era el líder del grupo. Mi hermano quería ser Wolverine. A mí me parecía muy hostil. Yo quería ser el “chico bueno” (jajajaja súper ensayadito mi papel desde ese entonces). Ayer vi la película de Wolverine. No me pareció fabulosa pero sí muy entretenida, aunque debo reconocer que no soy muy parcial a la hora de hablar de los X men (pero es innegable que la tercera edición de la saga es terrible y que la dos es fantástica). Lo que sí extraño en las cintas es ver a la poderosa Rogue en acción. Me fascina como actúa Anna Paquin (en El Piano a pesar de su corta edad es fabulosa… Óscar a Mejor Actriz de Reparto en 1993), pero francamente esa frágil y temerosa Rogue no tiene nada que ver con la imagen de los cómics y las caricaturas. Y Rogue siempre fue de mis personajes favoritos. Me encanta su relación de amor-odio con Gambito. Hablando de Gambito, me encantó verlo en la película de Wolverine. Su ácido humor se extraña en las tres partes de la saga fílmica…


El casting de las cintas (a excepción de Rogue) es fabuloso. James Marsden, Hugh Jackman, Halle Berry y Franke Jamsen como Cíclope, Wolverine, Tormenta y Jean Grey son geniales. Además, honestamente, deberían dedicarse a repoblar este planeta. También podrían invitar a la guapísima Rebbeca Romjin. Sir McKellen como Magneto y Patrick Stewart como el profesor X están excelentes. Los personajes de la cinta son buenos, reflejan la complejidad que demuestran en los cómics. Además, la producción es espectacular. Ya sé, ya sé, amo a los X men no lo puedo evitar. Tengo que reconocer que, en contadas, pero en muy contadas ocasiones, mi niño interno se asoma del oscuro baúl donde está amordazado y amarrado desde hace medio siglo y se emociona cuando ve pelear a los buenos contra los malos. Una de estas ocasiones, es cuando aparecen los X men… Buenas noches y buena suerte…